Ayer os mostraba cómo se puede hacer azúcar de colores, y hoy os enseño uno de los muchos usos de este azúcar. En este caso he utilizado el azúcar azul que hice ayer (dura mucho tiempo en perfectas condiciones en un tarro de cristal) pero se puede hacer incluso con el azúcar blanco sin teñir y el resultado es igual de espectacular.
Necesitamos: azúcar en un plato, una galleta para decorar (no os pongais a hablar por teléfono cuando teneis galletas en el horno, como les quites el ojo un momento ... ¡se te tuestan como un conguito!) y glasa blanca para delinear.
Delineamos el dibujo que queramos "escarchar" con glasa.
Antes de que se seque la glasa ponemos la galleta boca abajo en el azúcar y con cuidado la movemos un poco para que se le pegue bien el azúcar. Al levantarla la sacudes un poquito con cuidado para que caiga el azúcar sobrante sin tocar la glasa que todavía está fresca ,si ves que no se ha pegado el azúcar uniformemente, vuelve a ponerla en el azúcar y repite las veces que consideres necesario.
El resultado es muy espectacular (pero que conste que esta galleta es la más perfecta de las tres que he hecho y puede que tengas que ensayar un poco hasta que quede a tu gusto).
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