viernes, 26 de octubre de 2012
un capricho de vez en cuando
Hoy en día con la cantidad de dulces que toman los niños hay que tener cuidado y no darles demasiados caprichos a este respecto (obesidad infantil, caries, etc, etc). Pero de vez en cuando se merecen una merienda especial, porque hicieron los deberes sin rechistar, porque recogieron los juguetes sin tener que gritarles como un pregonero, porque te plantaron un beso y un abrazo sin motivo ... lo que querais, pero este capricho se prepara en un periquete con los siguientes ingredientes:
Un pastelillo tipo "fosquitos", un palo de helado, y restos de glasa (me remito al post anterior de galletas decoradas que siempre sobra de decorar galletas y en el frigo aguanta un tiempo, así que además de para próximas galletas, yo lo utilizo para decorar cualquier cosa como ireis viendo, que ¡no se puede tirar nada!).
Metemos el palo con cuidado hasta el final del pastelito para que aguante mejor los mordiscos (cuidado que cuando queda poco pastel se puede caer como los últimos trozos de un polo).
Y decoramos, que cualquier dibujo les encanta y da un toque especial al pastelito de siempre. Yo me he inspirado un poco en Halloween, pero la verdad es que siempre depende de los colores que tenga en ese momento de glasa en el frigo, porque no merece la pena prepararla para esta decoración.
Añadimos unos ojos y listo! Me encanta su sorpresa, mejor que un kinder!
Etiquetas:
caprichos dulces,
Merienda,
pastelitos decorados
Ubicación:
España
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario